viernes, 1 de diciembre de 2017

LA DOTACIÓN DEL GOBIERNO PARA AYUDAS FPU PARA EL AÑO 2018 DECEPCIONA


Según el INE, la partida del PIB destinada a I+D+i se reduce por quinto año consecutivo, situándose en el 1,22€, lejos del 2% exigido por Europa para el año 2020.

El pasado 21 de noviembre de 2017, el MECD, publicó la concesión de ayudas para la formación de profesorado universitario (FPU), integrado en el subprograma de Formación y Movilidad del Programa Estatal de Promoción del Talento y su Empleabilidad. La publicación de la Convocatoria, según el MEDC se hará efectiva en cuanto la ayuda haya sido fiscalizada.

Como comunicamos anteriormente, por acuerdo del Consejo de Ministros de 30 de diciembre de 2016, el Plan Nacional de Investigación Científica 2013-2016 ha sido prorrogado hasta que se apruebe el futuro Plan Estatal correspondiente al periodo 2017-2020.

En su comunicado afirman que este año destinarán a este fin 71,3 millones de euros, convocándose 850 plazas (17 reservadas a estudiantes con discapacidad) para la suscripción de contratos laborales predoctorales de 48 meses (72 en caso de estudiantes con discapacidad). Además especifica que el importe de las ayudas es de
1.173 euros mensuales (12 mensualidades y 2 pagas extraordinarias) más los gastos de Seguridad Social.

Es el mismo presupuesto que para el año 2016, a la espera de la publicación de la convocatoria, la novedad de este año sería que para cumplir con lo establecido en el RD 99/2011, de 28 de enero, por el que se regulan la enseñanzas oficiales de doctorado, se establecerá la opción de que aquellas personas que antes de iniciar el cuarto año de contrato predoctoral hayan finalizado la tesis doctoral, podrán formalizar un contrato posdoctoral por un año con el centro de adscripción donde realizaron la tesis doctoral.

El Gobierno sigue sin aceptar la importancia de la Investigación para el desarrollo de la sociedad y su modelo productivo y sigue con sus recortes, obviando que los países que ofrecen a sus ciudadanos una mayor calidad de vida son los que tienen un mayor presupuesto en I+D+i.

Para UGT uno de los principales problemas es la pérdida amplia y continua de jóvenes investigadores, que con una gran formación y excelentes capacidades son expulsados del sistema por falta de recursos. Esta “fuga de cerebros” es un efecto negativo, tanto en la economía como en la sociedad.